Por Ernesto Madrid

El presunto feminicidio de la joven madre Ariadna Fernanda López, de 27 años ha escalado de crimen a asunto político que llevó a la jefa de gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, a acusar al fiscal general de Morelos, Uriel Carmona, de intentar ocultar el crimen por presuntos “nexos” con el principal sospechoso del caso, algo que este negó categóricamente.

Lo curioso es que la fiscalía de Morelos ha dejado correr los días, reticente a entregar el expediente, y con ello las dudas del ¿por qué? En el entredicho de las acusaciones de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum de que se trata de “Una investigación desaseada, encubridora, que aún no quieren entregar la carpeta de investigación, y la calidad del personaje”, es decir Rautel “N” que supuestamente tiene relación con las autoridades judiciales de Morelos en particular con Uriel Carmona.

El detalle está en que el fiscal morelense tiene dos referencias negativas: la primera por el delito de delincuencia organizada y la otra por presuntas operaciones con recursos de procedencia ilícita, lo que lo pone en entredicho.

A lo anterior se suma que, en 2021, la fiscalía general de la República (FGR) realizó una petición de desafuero en contra de Carmona Gándara, debido a que no contaba con los exámenes de control de confianza, a lo que el funcionario estatal respondió que sí cuenta con ellos y que fueron realizados por la misma dependencia federal, pero jamás exhibidos.

La segunda, que tiene que ver con la trama política es que en febrero de 2018, durante el mandato de Graco Ramírez, enemigo político del presidente López Obrador y acusado de corrupción, nepotismo y abuso de poder con el que benefició a un gran número de sus familiares durante su gobierno, se le promovió para el cargo y el Congreso de Morelos designó a Uriel Carmona Gándara con 22 votos como titular de la FGE para los próximos 9 años, en sustitución de Javier Pérez Durón, en el entendido de que encubriría todas las acusaciones en su contra.

En este enredijo, el presidente López Obrador pidió a la fiscalía general de la República que atraiga el caso para determinar si fue feminicidio o intoxicación alcohólica y broncoaspiración con el fin de que se dejen de ‘pelear’ Sheinbaum y Carmona, pero con el respaldo presidencial a la primera y al gobernador de la entidad Cuauhtémoc Blanco, que no ha podido destituir al fiscal porque no cuenta con la aprobación de la mayoría de los diputados locales pese a que son de Morena.

Otro detalle interesante que enreda más al fiscal Uriel Carmona en su presunta relación con el empresario acusado del feminicidio Rautel “N”, es que este tiene negocios como accionista de la empresa RCF y Asociados Seguridad Privada, SA de CV, fundada en 2021, cuyos servicios se prologarían hasta el estado de Morelos y con lo cuál le permitía tener relaciones cercanas con las autoridades del sistema judicial y de seguridad de la entidad.

Ahora este detalle que se engrandeció en la Ciudad de México le permitió al gobernador Blanco demandar a las diputadas y diputados del Congreso de Morelos para valorar la permanencia Uriel Carmona Gándara como titular de la Fiscalía, ante su fallida intervención en el caso de Ariadna Fernanda, una joven desaparecida en la Ciudad de México y encontrada sin vida en Tepoztlán.

Esto porque el presidente quiere que se destituya al fiscal Uriel Carmona porque responde a los intereses de Graco Ramírez, pero resulta que Blanco no ha podido cabildear en el Congreso local porque sólo controla a 5 de los 20 diputados que existen y no completa los 14 que requiere.

Lo cierto es que las conversaciones de WhatsApp entre Rautel ‘N’ y Vanessa ‘N’, que intercambiaron luego de dejar el cuerpo en Tepoztlán, Morelos y reveladas este miércoles por el diario El País apuntan a que sí en efecto, ambos acusados intentaron preparar una versión común de lo ocurrido, pero las presiones de los amigos de Ariadna Fernanda, que demandaban más información, provocaron que cayeran en contradicciones.

Al final la pareja acordó ir al velorio el 3 de noviembre, lugar en el que Rautel dio una entrevista a medios de comunicación en la que aseguró que Ariadna había tomado un taxi, pero lo amigos pidieron pruebas de que se había ido viva del edificio cuando cayó el video donde se ve a Rautel cargando el cuerpo de Ariadna.