Ernesto Madrid

Mientras el aún dirigente del PRI, Alejandro ‘Alito’ Morenos se refería a su correligionaria legisladora en el Congreso, Yolanda de la Torre como “chingona mi Yola, chingonsísisma” por defender su iniciativa en la que se propone extender el uso del Ejército y Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública hasta 2029, el dirigente del PAN Marko Cortés, no sólo le negó el saludo, sino que afirmó que la relación con él ¡se acabó!

El escenario en que se dieron las circunstancias fue distinto, pero no distante. En el primer caso, fue este miércoles cuando el dirigente priista Alejandro Moreno, festejó de manera poco ortodoxa la defensa que realizó su compañera de bancada, a la iniciativa que se aprobó en la Cámara de Diputados para extender la presencia militar en las calles por 7 años más.

La sorpresa llegó el jueves, cuando el dirigente tricolor se presentó en Durango a participar en la toma de protesta de Esteban Villegas como gobernador del estado, en donde el líder del albiazul fue contundente. “hemos dicho con claridad que ya no habrá relación porque ya se perdió la confianza con la dirigencia nacional del PRI porque se deshonró la palabra y se incumplieron los acuerdos”, así de claro.

De hecho, cuando Marko Cortés llegó al acto, saludó a su homólogo perredista Jesús Zambrano, pero le negó el saludo a Moreno Cárdenas, y a la salida declaro a los medios de comunicación, que la relación con el líder del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, se ha terminado.

No obstante, el dirigente panista condicionó la continuidad de la alianza Va por México en torno a la actuación que tengan los senadores que confió en que la reforma sea frenada, en tanto los legisladores priistas sean “consistentes con lo que han dicho”.

Lo cierto es que el debate en torno a los militares en las calles o la Guardia Nacional al ejército se ha convertido en un ‘primor’ entre Morena y el PRI, que, por un lado, están detrás muchos ex priistas y detrás del tricolor muchos que buscan o la ‘impunidad’ o la oportunidad en el nuevo gobierno morenista que ha cimbrado con su avance político.

En realidad, esto es plausible, ya que el llamado ‘esquirol’ por algunos analistas políticos, ‘Alito’ no dejó pasar la oportunidad de entregarse a los brazos de Morena, porque cuando dijo que la iniciativa de su partido de alargar el periodo de los militares en las calles era en línea con la sociedad, que tiene una opinión buena de hasta 84% sobre estos, en el fondo pensó en él mismo.

¿Por qué? Bueno dicho con toda verdad, cambió su libertad por el respaldo político al presidente, pero no puso un límite y agudizó los enfrentamientos con sus aliados en donde el presidente consiguió lo que había fraguado en su estrategia política, romper la alianza.

En resumen, es como aquel dicho que reza: el Comal le dijo a la olla, mira que prieto estás y la olla le contestó, es que no te has visto por detrás”.