Las entidades del país menos Chiapas, gastaron más de lo planeado a inicios de 2022 cuando los 32 estados presupuestaron 2.3 billones —millones de millones— de pesos ($2,325,477,252,223.23) y terminaron gastando 2.5 billones ($2,552,181,873,708.15).

Dicho de otra forma, en promedio los gobiernos locales gastaron casi 10% más (9.75%) de lo que presupuestaron originalmente cuyo monto es superior al reportado por el gobierno federal, que en ese mismo año gastó 7.2% más de lo que había presupuestado originalmente.

Estamos hablando de acuerdo a un análisis de los presupuestos locales de Mexicanos Contra la Corrupción de casi 227 mil millones de pesos excedentes en el ámbito local que bien, señala, hubieran alcanzado para financiar cinco veces todo el presupuesto anual de Quintana Roo.

Una de las razones que pueden incidir en estas ampliaciones es la contratación de deuda pública, es decir que, si la deuda que contrató un estado no fue planeada en su ley de ingresos y el presupuesto de egresos, entonces representa una ampliación en el monto de recursos de la cuenta pública de los gobiernos estatales.

De acuerdo con el informe de MCCI para 2022 llamó la atención la deuda adquirida por el gobierno de Nuevo León, que fue equivalente al 18.5% de su presupuesto devengado. En el resto de los 20 estados que contrataron deuda el año pasado, ésta no fue mayor al 7% del presupuesto que ejercieron.

En contraste con lo anterior, 17 estados presentaron subejercicios (no lo gastaron) en programas sociales en 2022 por ejemplo en 13 entidades, los subejercicios fueron superiores a los 100 millones de pesos que, al comparar lo efectivamente gastado con lo presupuestado, es posible medir la efectividad de la política social de la administración centralizada de los gobiernos estatales.

Lo cierto es que cuando las autoridades aprueban recursos que no pueden ejercer en este tema, puede deducirse que hay importantes áreas de oportunidad en la planeación e implementación, ya que la misión de los gobiernos no es ahorrar, sino invertir de manera adecuada el presupuesto en los asuntos más prioritarios, tal como lo son los programas que disminuyen la pobreza y la desigualdad en los estados del país.

Pero no fue así, estados como Colima, Morelos y Tlaxcala, tuvieron ampliaciones significativas con 2,021%, 1,484% y 1,112% más, respectivamente que no fueron para gasto público, sino que se destinaron a productos como: Vestuarios, Blancos, Prendas de protección y Artículos Deportivos en dónde también destaca Guerrero, un estado con mucha inseguridad que tuvo una ampliación un aumento del 2,888%.

Otro dato interesante es que al analizar el ejercicio del gasto de un concepto tan controversial como el de servicios de comunicación social y publicidad oficial, observamos que, en 2022, un total de 28 gobiernos estatales gastaron más de lo inicialmente presupuestado.

Los casos en los que las ampliaciones presupuestales representan más de 10 veces —o 1,000% de lo aprobado— llaman la atención no solo por el monto ejercido, sino porque se exhiben grandes diferencias con respecto a la planeación de los presupuestos lo cual indica que muchos gobiernos no tienen una idea clara de cuánto invertirán en determinados insumos al momento de hacer los presupuestos de egresos.

En 10 estados en los que se aprecia un aumento de más del 200% en el gasto inicialmente planeado para la adquisición de equipo de transporte en 2022 está Nayarit, por ejemplo, se registró una ampliación de 8,565% para este rubro y Jalisco con 3,663%.

Este ejercicio resulta ser puntual ya que durante el último trimestre del año se discuten públicamente los proyectos de leyes de ingresos y presupuestos de egresos, no solamente a nivel federal, sino también en todos los estados y municipios del país y su análisis y seguimiento es importante, en tanto que esta inversión tiene un impacto directo sobre las ciudades y las comunidades.