Los asiáticos son denominados “altaicos” debido a que se supone que una linea divergente de los humanos evolucionó en las inmediaciones de la cordillera de Altai (Asia central).

Se trata de una zona con un clima bastante extremo y difícil, lo que condiciona cierto grado de aislamiento genético, así que se supone que estas condiciones influyeron en la aparición de adaptaciones: disminución de pigmentación respecto a la población original procedente de África, y adaptación de los párpados para evitar la intensa radiación solar reflejada en la nieve, así como la congelación de la película lacrimal sobre córnea. En aquella época debió de ser algo bastante más frecuente y entonces es lógico suponer que se trata de un rasgo adaptativo al clima frío, nevado y ventoso, en los humanos de entonces.

Así la teoría de los genetistas…